Con el fin de revelar los sucesos que están por llegar, esclarecer los que ya han pasado o bien para tratar de ver la energía o espíritus que rodean a las personas es para lo que los videntes tienen su razón de ser.
Estos son personas que tienen esas entre sus capacidades y además la facultad de la transmisión para poder comunicarlas.
Los videntes, por definición, son personas que poseen clarividencia para ver sucesos o acontecimientos ocultos al resto de los mortales, que son capaces de prever bien durante el sueño o bien por la inducción de un trance, cosas que escapan a la vista de los demás. Para determinar si se trata de un profeta, un clarividente, un psíquico o bien de un visionario se tiene que acudir a la forma de transmitir sus visiones, cada persona que es dotada con este don le da el uso que cree más conveniente.
Cómo consiguen ver los videntes
Ellos mismos explican que sus visiones le abordan cuando se encuentran en medio de un profundo sueño, bien sea natural o provocado por algún elemento externo. De esta manera la consciencia pierde sus barreras y es capaz de superar los obstáculos del mundo terrenal.
Se trata de un don porque no todas las personas son capaces de tener dichas visiones, o al menos de entender que se trata de una predicción del futuro. Así los videntes son capaces de ver un suceso que puede parecer “extraño” y extrapolarlo a su realidad transmitiendo a quien lo necesita.
Pero, ¿cuánto de verdad hay en los videntes?
Desde una mente racional y objetiva siempre se arroja la premisa de que las visiones no tienen credibilidad, se trata de sucesos paranormales que no atenderán a ningún tipo de patrón y que pueden o no suponer una previsión del futuro (o del pasado).
Lo que está claro es que a lo largo del tiempo muchos han puesto de manifiesto su don y han conseguido sorprender a la opinión pública.
¿Qué son las videntes buenas?
Las videntes buenas son unas profesionales que te ayudarán a saber a ciencia cierta algunos detalles que corresponden a tu futuro y que, de entrada, no están destinados a que los puedas conocer. La diferencia principal entre las videntes buenas y aquellas que no lo son, es que las primeras tienen unos dones que realmente existen y que pueden poner a disposición de cualquier tipo de consultante.
Desgraciadamente, a lo largo del mercado podemos encontrar algunas personas que se hacen pasar por falsos videntes con el único objetivo de conseguir el máximo dinero posible a través de fraudes o de estafas. El problema es que el usuario no siempre las puede llegar a identificar hasta que es demasiado tarde.
Si deseas una consulta de videncia de manos de profesionales, puedes acceder a la zona de videncia en la parte superior de la web. A continuación, te hemos preparado algunas claves para que sea más fácil poder identificarlas.
¿Cómo podemos identificar a las videntes buenas?
Sensaciones: Es cierto que nosotros no tenemos poderes y que no podemos ver más allá de lo que nos muestra nuestros sentidos… ¿O quizá si? De hecho, la magia fluye de igual manera en todos nosotros y es capaz de hacernos ver cosas que, en principio, podrían parecer que no están. Si nada más ponerte en contacto con una vidente te encuentras con algunas sensaciones raras que te hacen desconfiar, lo mejor que podías hacer es buscar a otra que si que sea capaz de darte la confianza que necesitas. Digamos que es un mecanismo interno de la mente para poder luchar contra este tipo de fraudes.
Costes: Si, desgraciadamente, has caído en las garras de una de estas videntes, al principio te intentarán cobrar por el servicio y alegarán que no ha funcionado porque la magia no es lo suficientemente poderosa para ello. Será entonces cuando te dirán que tienes que invertir una cierta cantidad de dinero para conseguir una magia todavía más poderosa. Por supuesto, no debes de creer lo que está diciendo y deberías de exigir que te devolviera el dinero.
Testimonios: Si queremos estar seguros de que hemos contratado a videntes buenas lo que deberíamos hacer es contar con testimonios sobre personas que hayan probado sus servicios. De esta manera, ya tendremos una referencia de calidad y será mucho más improbable que nos pueda llegar a estafar.
Identificar a una vidente buena no es nada sencillo, pero gracias a nuestros consejos lo vas a tener mucho más fácil. ¡Ten cuidado que no te estafen!